Me senti como en Bogota en diciembre, gente por la calle ofreciendo cosas para vender, cuando se compra toca regatear, hay comida y musica por todo lado y multitudes por todo lado, uno de mis profesores dice que hasta ladrones, cosa que no se ve en Brest, aparecen para la foire.
Me antojé de todo, vi un monton de cosas que no necesitaba pero que seria bacano tener, finalmente solo compré un diccionario de francés en 1€ que lo estaban ofreciendo en 2€. Ahmed compro una chaqueta y un trancoyo electrico para calentar el agua, Julieth un reloj, Raushan un vestido y creo que una plancha (nueva en 5€, yo compré una la semana pasada en 15€, pero que se le hace).
La pasamos bien, hizo buen dia y comimos churros cubiertos no solo con azucar sino tambien con chocolate (aqui conocidos como chichi).
Para que vean el poquito de gente que habia, una foto de la place de la liberté en donde solo se permitia que vendieran cosas los ninos.

1 comentario:
que bacano, pero de que se antojo que no pudo???
debí comprarse un trancoyo raro
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